jueves, 1 de diciembre de 2011

CUERPO Y BELLEZA EN LA ANTIGUA GRECIA

La majestuosidad de la expresión en cualquiera campo de las artes ha sido valorado desde hace mucho tiempo por las primeras civilizaciones del mundo, es así que, desde sus inicios los Griegos ya hicieron representaciones de hombres y mujeres tomados como modelo de perfección y de belleza.

Gracias a ese afán de historiadores, arqueólogos, restauradores, etc., por conservar las huellas que el hombre dejó en el tiempo, es que hoy podemos disfrutar de una muestra tan valiosa que llena de emociones a cualquier espectador por tener la oportunidad de ser testigo de la existencia de piezas tan antiguas que pertenecen a los siglos I al VII a.c., que permiten a la vez sobrevalorar la habilidad extrema que en aquel tiempo tuvieron para realizar un trabajo de detalles minuciosos y de alta categoría.

En la muestra se destacan esculturas de tamaños variados desde unas muy pequeñas hasta unas totalmente grandes, cuya expresión nos quiere dar a entender como era la sociedad de aquel tiempo en el que sus trabajos evocaban a lo religioso y lo sexual interpretado sobretodo por las poses de cada uno de sus personajes, en los que claramente se puede observar como aquellas esculturas de jóvenes atletas en lugar de representar su masculinidad, tienen un carácter femenino tanto en la delicadeza de sus rasgos físicos como en el tratamiento de sus cabellos y el movimiento de sus cuerpos, que particularmente puedo decir apenas se diferencian de las mujeres por los peinados o tocados que llevan y por las túnicas transparentes que majestosamente cubren su cuerpo expresando la sensualidad de cada una de ellas; sin dejar de mencionar que se pudo encontrar una representación de una pareja homosexual, que de alguna manera hace que se pueda intuir y asegurar que en esta época este tipo de actitudes era algo muy normal.

Muchos de estos trabajos fueron hechos en mármol y en menor cantidad en bronce y en cerámica, al parecer ninguno de estos materiales fueron un obstáculo para las fabulosas representaciones que se lograron, incluso en dos piezas escultóricas femeninas se pudo observar la presencia de incrustaciones de plata y diamante en sus ojos, destacando que estas esculturas tienen unos detalles de pliegues y cenefas en el filo de sus túnicas que resulta impresionante por el pequeño tamaño en el que se trabajó; así también en las piezas que fueron trabajadas en materiales como el bronce se hace mas notorio el desgaste y la corrosión por el pase de los años, pero a pesar de todo aún se conservan, sin importar cuanto tiempo más siga transcurriendo.

Otro aspecto importante que se pudo observar, es la representación de los dioses como afrodita diosa de la fertilidad y la belleza, Hércules símbolo de poder y fuerza, cupido símbolo del amor y la pasión de los seres humanos, etc., cuya distinción y magnificencia se resalta incluso por el tamaño en el que están trabajados y por el atuendo que llevan en sus cuerpos.

A parte de estas representaciones que causaban tal exaltación por el increíble trabajo realizado, también se debe referir otros personajes como las mujeres en sus diversas etapas de crecimiento incluyendo el matrimonio que muchos de ellos fueron convenidos, sin dejar de mencionar que cuando una mujer moría muy joven elaboraban unas lápidas tratando de lograr la mayor perfección de belleza para de alguna manera compensar la mala suerte que tuvo de no haber podido disfrutar de ese paso tan importante en una mujer, como es la oportunidad de ser madre; de igual manera y en contraposición a lo anterior, igualmente tenían su espacio en la sociedad griega los enanos y discapacitados que eran una especie de bufones que se encargaban de divertir a sus altos gobernantes.

Además en la decoración cerámica se destacan escenas de atletas en su competencias de carrera y sus celebraciones ante los triunfos atléticos cuyos elementos de premiación ofrecidos a los ganadores siempre era una manzana o una corona de laurel que luego era ofrecida a los Dioses, destacando que el vestuario característico que usaban las mujeres en estas participaciones consistía en un manto que cubría por completo su parte izquierda, mientras que su pecho y brazo derecho quedaban totalmente al descubierto; de forma similar sucedía con el vestuario de los filósofos en el que era fácil distinguirlos pues llevaban parte de la misma túnica recogida sobre su brazo izquierdo, mientras que su brazo derecho quedaba al destapado.

En conclusión creo que el haber tenido la oportunidad de presenciar esas obras tan maravillosa en esta exposición, me permitió imaginarme la inmensa capacidad que tuvo y que tiene un ser humano para expresar lo que a su alrededor está sucediendo o simplemente representar lo que considera como importante para su vida; claro está manteniendo los cánones que en cada época se crea conveniente utilizar o proponer como bello o perfecto, en aquel tiempo los que fueron considerados como absoluta belleza y perfección de alguna manera son un referente de los conceptos que hoy en día se puede manejar como un absoluto, pero en realidad en la actualidad nos lleva a meditar hasta que punto una belleza física puede significar perfección, y tratamos de ahondar en la parte subjetiva queriendo ver más allá de lo que nuestra visión nos permite valorarla como tal.

No hay comentarios: